Decía Aristóteles que “De todas las variedades de virtud, la generosidad es la más estimada“. Inculcar estos valores a los jóvenes es clave para que esta sociedad mejore.
Eso es lo que está consiguiendo la familia de Laura, y la propia Laura, que han decidido que los regalos de su primera comunión vayan para ayudar a madres y a niños en Kinshasa a través de Monkole.
Cómo hizo su hermana mayor, Celia, hace unos años, Laura también ha querido que ese momento tan importante que es la Primera Comunión, no se quede sólo en fotos y regalos, sino que tenga una importante repercusión en personas que lo necesitan: en concreto, con los 1800€ de su donativos, para ayudar a que 3 madres embarazadas de familias sin recursos que acuden a Monkole, y a 3 niños con raquitismo, para que puedan ser operados en el Hospital
MUCHAS GRACIAS LAURA
Porque muchos necesitamos ejemplos como el tuyo para ser más generosos, y par adarnso cuenta de que no hay nada mejor que ayudar a quien de verdad lo necesita. Gracias a ti, 9 personas (3 madres y sus hijos, y los 3 niños curados de raquitismo) verán su vida de otra manera, y sentirán una inmensa alegría a saber que alguien que no les conoce ha decidido ayudarles a cambiar su vida.