PABLO
De 20 años, pasa a tercero de enfermería. Le encanta cooperar y venir a Monkole siempre fue su sueño. El año pasado tuvo la oportunidad de venir y fue una experiencia que le marcó así que cuando Enrique le propuso volver no dudó el volver para empaparse más de la cultura del Congo, revivir y recrear nuevos recuerdos que siempre formarán parte de él.
MAR
De 24 años, terminó el doble grado de Derecho y Estudios Internacionales. Siempre ha sentido una conexión muy fuerte con la África subsahariana y llevaba muchos años queriendo venir a un país como el Congo, pero no a visitarlo como un turista más. Le entusiasmó la idea de venir a Kinshasa después de participar en varios proyectos de ayuda a personas en situaciones vulnerables en España y le encantaría ver realmente cuál es la situación de los congoleños, así como las labores de la fundación y su impacto en la vida de estas personas.
SABELA
De 20 años, pasa a cuarto de medicina. Decidió embarcarse en esta aventura porque estaba cansada del ritmo estresante y en parte vacío de Europa. Llevaba mucho tiempo queriendo dar algo más en un voluntariado y ayudar desde un punto de vista más sanitario. Espera aprender de la cultura, de la forma de pensar y ganar conocimientos académicos.
ISABEL
De 17 años, entra este año en el doble grado de Magisterio y Psicología. Siempre quiso venir a África, continente que le llama mucho la atención por su sencillez, alegría y su forma de vivir. Espera aprender a valorar más la vida, vivir una experiencia única y, quizás, en un futuro, volver para seguir ayudando.
CRISTINA
De 18 años a poco de cumplir los 19 en el Congo. Estudia TSEAS, grado superior de deporte. Su padre estuvo en el hospital de Monkole en marzo y ella se moría de envidia por venir. Él le dijo que había una plaza para ella este verano y se animó sin pensárselo dos veces. Quiere participar activamente en los proyectos de la fundación con la esperanza de ayudar, aprender y crecer como persona.
CHAR
De 23 años, estudió el doble grado de Derecho y Estudios Internacionales. Siempre se sintió muy atraída por la cultura africana y le pareció la oportunidad perfecta para adentrarse en ella y vivirla desde la cercanía. Espera irse de aquí siendo más consciente y apreciando más lo que tiene y habiendo descubierto una nueva cultura que le abra la mente.
IRENE
De 24 años, estudió biología y lleva años interesada en los proyectos de la fundación, colaborando de forma indirecta. En el momento en que le propusieron venir se lanzó a la piscina. Espera comprender un poco más cómo trabaja Amigos de Monkole en el Congo, cómo funciona el hospital y aprender del contraste de la forma de vida de este país.
MARÍA
De 22 años, pasa a quinto de odontología. Desde siempre ha querido hacer un voluntariado, y no quiso rechazar la oportunidad que surgió de venir con Amigos de Monkole. Está muy ilusionada con el proyecto, en el que está invirtiendo todas sus dotes de fotógrafa.
JESÚS
De 17 años cuando entró en el Congo, es un estudiante de primer grado de medicina que le encanta la música y tocar la bandurria. Siempre le llamo la atención el voluntariado, ayudar y aprender cómo funciona la sanidad y la medicina en otro continente, así que cuando Enrique le propuso venir no se lo pensó dos veces. Le encantaría ayudar de primera mano a los niños.
JULIO
Al igual que Char y Mar, con sus 23 años acaba de terminar el doble grado de Derecho y Estudios Internacionales. Ha aprovechado su afición por la lectura para escribir las entradas diarias de este blog. Lleva muchos años escuchando las charlas de Enrique en Tajamar, lo que le ha movido a venir al Congo, con el objetivo de impulsar la Fundación Amigos de Monkole.
CHRISTIAN
Tiene 22 años y empieza Ingeniería Agrónoma en la Universidad de Kinsasa. Lleva siendo el guía de Enrique varios años, porque le gustan los Amigos de Monkole y los españoles. Tal y como él mismo ha reconocido, cuando pasa tiempo con los españoles aprende cosas de un lugar en el que nunca ha estado, y eso le enriquece mucho. Como nos ha confesado, él pensaba que los blancos eran racistas. Pero siendo guía de los Amigos de Monkole se ha dado cuenta de que no lo son en realidad, sino de que son amables y buenos.
ENRIQUE
Es el archifamoso presidente de la Fundación Amigos de Monkole. Compagina su actividad profesional en Tajamar con el trabajo de la Fundación, que apoya la labor realizada por el centro hospitalario Monkole en Kinsasa. Aunque apenas tiene tiempo libre, le encanta el Real Madrid. De hecho, va creando afición aquí en el Congo.