Hace un año recibimos este correo:

“Te escribo para pedirte algo, como de costumbre… pero es que acabo de recibir una carta firmada por las tres profesoras responsables de tercero y no me he podido resistir. Escriben para pedir que se admita en el último curso, a una de nuestras alumnas, que ha pasado por aquí, para explicar que el año que viene no podrá estudiar.

Su madre, que en este momento está enferma es la que se encargaba de pagar la Escuela. Ha estado trabajando en verano para poder ahorrar pero al final ha utilizado ese dinero para los cuidados de su madre.

Es una chica que conozco bien, es valiosa, ha distinguido varios años, es apreciada entre profesoras y amigas, trabajadora y aunque pasa desapercibida, se ocupa bien de los paciente que están a su cargo. En fin, ya recibe una beca pero no es suficiente para cubrir los gastos del ultimo año de estudios.
Las profes han propuesto que se intente buscar una ayuda suplementaria que podría rembolsar poco a poco cuando empiece a trabajar, o alguna ayuda que complete lo que le falta sin necesidad de rembolsar después, dada su situación familiar.

Haciendo cálculos, buscamos 1.050$ para esta chica, que en mi opinión, vale la pena. Si pudierais ayudarnos os lo agradeceríamos mucho.

¡AYUDA A QUE UNA CHICA TERMINE SUS ESTUDIOS COMO ENFERMERA EN CONGO. UNA ENFERMERA BIEN FORMADA=VIDAS QUE SE SALVAN EN NUESTRO PAIS!”